Es muy gratificante ver de nuevo en la ciudad de Tunja, el ingreso de miles de estudiantes de nuestra Uptc, en total las matriculados en el II semestre del 2010, fueron, 23411 estudiantes, en todas las sedes. Llama la atención sin embrago el número elevado de estudiantes que desertan por causas académicas y de pobreza, la cifra es escalofriante, por el alto nivel de deserción, por el primer motivo desertaron 513 y por el segundo, fueron 1041 respectivamente, para un total 1554 estudiantes en el 2010.
Este nivel de deserción es escandalosamente alto, y refleja la crisis que vive la sociedad boyacense, los padres de familia, y en especial una juventud que no tiene posibilidades de culminar una carrera universitaria, especialmente por problemas de pobreza, según estadísticas arrojadas por el Grupo de Organización y sistemas de la UPTC.
El presupuesto aprobado para el año 2011, según acuerdo No 085 de 2010 asciende a la suma de $135.563 millones de pesos, de los cuales $90.000 millones son girados por la nación y $44.000 millones son recursos propios, por distintos conceptos, especialmente por pago de matriculas $22.674 millones de pesos.
Es necesario detallar, que de este presupuesto general $123.024 millones se van a gastos de funcionamiento, $1.010 millones a pago de la deuda y $11.527 a recursos de inversión. El abultado gasto de funcionamiento refleja el enorme costo y exceso de planta de nomina con que cuenta la universidad, especialmente en gastos administrativos. Esto no se compadece con los cerca de 1.000 profesionales, como docentes ocasionales de tiempo completo y catedráticos, tratados miserablemente y que son los responsables materiales del desarrollo y ejecución de las políticas académicas y de investigación que tiene planteada esta universidad. En estas condiciones, las producciones y resultados académicas son demasiado pobres, solo se publica en tres revistas indexadas, 97 grupos de investigación de la universidad, en el total nacional son 5000 los grupos reconocidos por Colciencias. Lo más preocupante es la pobre pertinencia de los proyectos en curso en investigación, realizados por convenios, llamase Gobernación de Boyacá y son prácticamente inexistentes con el sector productivo regional y con entidades del orden nacional.
Es de destacar la política nacional en esta materia, una de las locomotoras del actual gobierno de la prosperidad democrática es el de innovación, se aspira que del vergonzoso 0.16% de PIB que se invierte en investigación y desarrollo en el 2009, de los peores en todos los países de América Latina, se pase a invertir sumas importantes, sumando esfuerzos privados, mayores recursos para Colciencias, el 10% de la regalías, y otros fondos la suma como porcentaje del PIB en el 2014 estaría en el 1.5% del PIB.
Integración regional, inclusión social, y prosperidad para todos, están planteados como retos por este gobierno, es necesario que la juventud este activa y presente en este gran debate, de cara a una economía que se viene internacionalizando sin los recursos y la institucionalidad que nos permitan no seguir siendo perdedores, como ya lo hemos venido sufriendo en los últimos 20 años, Boyacá es un fiel reflejo de una región que ha perdido.
La nueva dirección de la UPTC, tiene el reto de sacar esta universidad adelante, y no permitir que los voraces apetitos politiqueros le terminen por hacer un daño enorme, en un momento crucial para el futuro de esta institución. Actualmente el tema de contratacion es un lunar en la administración entrante, el nombramiento de Decanos por afinidades politicas, la manipulación en los cargos etc. es una muestra de lo que esta por venir, merece que todos los estamentos esten alertas frente a los retos que plantea la entrada de Juan Cordoba en los dominios de esta importante institución.
PEDRO PABLO SALAS HERNANDEZ.
Concejal de Tunja
