El gobierno de Santos siempre ha demostrado que en materia social no se trae a consideraciones, profundiza privatizaciones, celebra tratados comerciales para enriquecer más a los ricos y reprime a los inconformes.
En Tunja, las protestas estudiantiles por las reformas regresivas del actual gobierno terminaron en disturbios, el exagerado uso de fuerza por parte de la policía demuestra que la ley se aprobara con base en la violencia. El estudiantado de la universidad exige mayor presupuesto y educación de calidad, para hacer frente a la ola de tratados comerciales que amenazan la estructura débil de la educación superior en Colombia. La respuesta no puede ser las golpizas, encarcelamientos, y judializacion que se sufren estudiantes en ciudades como Tunja
Es necesario que la sociedad civil, los estamentos universitarios y las directivas de la UPTC, no se dejen provocar por sectores externos que vienen pidiendo represión y brutalidad contra el movimiento estudiantil, macartizacion y señalamiento a las acciones que se dan en el marco nacional de protestas. Los estudiantes deben buscar mecanismos pacíficos de protesta
La defensoría del pueblo en los hechos de Tunja brilla por su ausencia, un hecho que debe ser denunciado a organismos nacionales e internacionales de derechos humanos
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